Ese domingo de calor.

Crecer no es aprender. Aprender no es evitar el dolor.

Escribir es llorar, llorar conmigo frente a mi, desnudarme en forma de palabras, para intentar una vez más sanar las heridas.

Escribir es llorar frente a lo que soy, frente a lo que no supe cambiar.
 Tengo tanto miedo.

Estoy comenzando a pensar que eso de lo "que no te mata te hace más fuerte" es una mentira de auto ayuda que nos hacemos a nosotros mismos para poder continuar olvidando por un momento todo lo que latente duele.
Yo no quiero ser fuerte, no lo elegí, no estaba en mis planes.
No quiero mirarme y ver tantas cicatrices por ese recuerdo, el recuerdo que invade mis pesadillas, que me hace tener que ser fuerte, pero ser tan frágil.

Hay heridas que no sanan
Que se quedan abiertas
Porque sin ti nunca cerrarán
Porque conmigo se quedarán